En el año de 2004 nace oficialmente  RIAC, la Región Ibero-American.

Historia

El 19 de mayo de 2003, durante la realización del X ERLAC (Décimo Encuentro Regional Latinoamericano de CIGRE) en Puerto Iguazú, los 7 Comités Nacionales Iberoamericanos de CIGRE entonces existentes (Argentina, Brasil, España, México, Paraguay, Portugal y Venezuela), le propusieron a la administración central de CIGRE la creación de RIAC, la Región Iberoamericana de CIGRE.
CIGRE, Francia, luego de analizar y actualizar su política de creación de Regiones, aprobó el 28/8/04 la Región propuesta, ad referendum de la Asamblea del 28/08/06, en la que se instrumentaron los cambios necesarios.

Los fundamentos en que se basó la iniciativa fueron:

• La voluntad de cooperación existente en los países iberoamericanos;
• el trabajo que vienen realizando en conjunto para la promoción de actividades de CIGRE en Iberoamérica;
• la identidad cultural;
• la afinidad de las dos lenguas hermanas de la Región (portugués y español);
• el conocimiento de los profesionales de estos países;
• la posibilidad de desarrollo de un área geográfica promisoria para CIGRE.

Los Objetivos de RIAC son:

• Estrechar los lazos de unión tecnológica y difundir la información de los temas relacionados con los sistemas eléctricos de potencia entre los países Iberoamericanos
• Compartir recursos y experiencias
• Integrar todos los países Iberoamericanos a la red CIGRE
• Su acción ha impulsado la creación del Comité Chileno de CIGRE en el año 2003 y el Comité Andino en 2006 (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú). También se han nominado e identificado contactos de CIGRE en diferentes países de la Región que no tienen Comités Nacionales.

Quien haya tenido la oportunidad de presenciar una de las famosas y tradicionales Sesiones Bienales del CIGRE en París observará que el ERIAC es la Bienal de la RIAC, que se desarrolla en un lugar paradisíaco, con la presentación y discusión de trabajos técnicos, más un comercial técnico. exhibición La calidad técnica de las actividades de CIGRE, sumada al espíritu de camaradería y amistad siempre presente en los encuentros, se acentúan en el ERIAC, gracias a la calidez humana propia de los iberoamericanos y la empatía de sus lazos culturales.